La Subsecretaría de Protección Civil y Gestión de Riesgos de Hidalgo anunció que se incrementará la vigilancia de las unidades transportadoras de gas licuado de petróleo (L.P.) que circulan por las carreteras del estado, con el objetivo de prevenir riesgos a la población. La medida surge a raíz de la reciente explosión de una pipa en la delegación Iztapalapa, en Ciudad de México, que dejó múltiples daños y generó preocupación por la seguridad de este tipo de vehículos.
En entrevista, el subsecretario de Protección Civil estatal, Román Bernal Díaz, explicó que en la entidad existe un monitoreo permanente de las vías federales y estatales, en el cual participan elementos de la Guardia Nacional.
“La coordinación interinstitucional es fundamental para reducir riesgos, sobre todo cuando se trata del traslado de materiales altamente peligrosos”, señaló.
Monitoreo en carreteras federales y estatales
El funcionario indicó que el trabajo conjunto no se limita a los cuerpos de seguridad, sino que también incluye a dependencias federales como la Secretaría de Energía y la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), responsables de la regulación del movimiento de pipas en tramos federales. “Estas instancias son las que cuentan con las facultades de supervisión directa, mientras que desde el ámbito estatal reforzamos la vigilancia en los puntos más transitados”, apuntó.
Bernal Díaz reconoció que, hasta el momento, no existe un registro preciso del número de unidades de transporte de combustible que cruzan diariamente el territorio hidalguense. Sin embargo, aseguró que el tránsito de estas pipas es constante y se realiza sin restricciones de horario, lo que representa un reto para las autoridades encargadas de garantizar la seguridad vial.
Desconocimiento sobre el número de unidades
La explosión en Iztapalapa, ocurrida la semana pasada, encendió las alarmas sobre los protocolos de seguridad en torno al traslado de gas L.P., un insumo de uso cotidiano en los hogares mexicanos, pero que también representa un alto riesgo en caso de fugas o accidentes. Al respecto, el subsecretario reiteró que Hidalgo mantendrá estricta vigilancia en carreteras como la México-Pachuca y la México-Tuxpan, consideradas rutas de alto tránsito de este tipo de vehículos.
Finalmente, Bernal Díaz hizo un llamado a las empresas transportistas a reforzar sus medidas de seguridad y someter sus unidades a revisiones constantes. “El objetivo es garantizar que lo ocurrido en Iztapalapa no se repita en nuestro estado. La prevención y la corresponsabilidad son claves para salvaguardar la integridad de la población”, concluyó.
