El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció el viernes planes para lanzar desde el aire alimentos y suministros a Gaza, en respuesta a la crítica situación humanitaria que vive el abarrotado enclave costero bajo el fuego del ejército israelí. Este anuncio llega un día después de la trágica muerte de palestinos que esperaban en fila para recibir ayuda, lo que ha puesto de relieve la urgencia de la situación.
Biden informó que la ayuda, distribuida desde aviones militares, será enviada en los próximos días, aunque no proporcionó detalles específicos al respecto. Otros países como Jordania y Francia ya han realizado entregas de provisiones desde el aire a Gaza.
“La gente está tan desesperada que personas inocentes han quedado atrapadas en una guerra terrible sin poder alimentar a sus familias, como se evidenció cuando intentaron recibir ayuda”, expresó Biden a los periodistas en la Casa Blanca al inicio de una reunión con la jefa del gobierno italiano, Giorgia Meloni.
El mandatario estadounidense abordó además las negociaciones entre Israel y Hamas, indicando que se están discutiendo puntos como la liberación de rehenes y un alto el fuego inmediato en Gaza por al menos las próximas seis semanas. También se busca permitir el aumento de la ayuda en toda la región de Gaza, no limitándola únicamente al sur.
La crisis humanitaria en Gaza es urgente, con al menos 576 mil personas -una cuarta parte de la población del enclave- al borde de la hambruna, según la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU.
Las autoridades sanitarias de Gaza reportaron que las fuerzas israelíes habían causado la muerte de más de 100 personas que intentaban acceder a un convoy de ayuda cerca de la ciudad de Gaza durante la madrugada del jueves. Este incidente ocurrió en un contexto en el que los palestinos enfrentan una situación cada vez más desesperada tras casi cinco meses de conflicto que comenzó con un ataque de Hamas contra Israel el 7 de octubre.
Israel ha atribuido la mayoría de estas muertes a las multitudes que se aglomeraron alrededor de los camiones de ayuda, afirmando que las víctimas fueron aplastadas o atropelladas. Un funcionario israelí también mencionó que los soldados dispararon posteriormente “en respuesta limitada” contra las multitudes que consideraron una amenaza.
A pesar de esta iniciativa, un funcionario estadounidense, hablando bajo condición de anonimato, señaló que los lanzamientos aéreos solo tendrían un impacto limitado en el sufrimiento de los habitantes de Gaza.