La sombra de los privilegios excesivos y el desvío opaco de recursos vuelve a cernirse sobre el Ayuntamiento de Pachuca. Nuevas revelaciones documentadas han puesto bajo la lupa a Percy Leonardo Espinosa Bustamante, exdirigente sindical y actual jubilado del municipio, quien percibe un ingreso mensual de 94,527 pesos, pese a que las condiciones laborales vigentes establecen un tope inferior para este tipo de pensiones.
De acuerdo con información oficial, Espinosa Bustamante, identificado con el número de empleado 000129, recibe actualmente 9 quinquenios, es decir, un reconocimiento salarial por 45 años de servicio. Sin embargo, las Condiciones Generales de Trabajo del H. Ayuntamiento de Pachuca de Soto —firmadas en 2021— marcan expresamente en su artículo 66, fracción XV, que únicamente se deben pagar cinco quinquenios, equivalentes a 25 años. Es decir, el exlíder sindical recibe una compensación mayor a la permitida por el reglamento.
Un sueldo desproporcionado para un jubilado
El desglose de su ingreso mensual es revelador:
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Sueldo base: $53,544.00
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Quinquenios: $38,552.00
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Despensa en efectivo y vales: $2,431.00
\nTotal neto mensual: $94,527.00
Este ingreso supera ampliamente el promedio de los jubilados del municipio y ha generado inconformidad entre sectores ciudadanos que denuncian trato preferencial y una estructura de beneficios creada para beneficiar a un reducido grupo de poder sindical.
Recursos públicos, opacidad y sin rendición de cuentas
La polémica va más allá de un caso aislado. El sistema de compensaciones y subsidios operado por anteriores administraciones incluye la entrega mensual de casi 3 millones de pesos al Sindicato por concepto del Fondo de Préstamos, dinero que, según la normativa, debería usarse bajo reglas claras para beneficio de los agremiados, pero que —de acuerdo con fuentes del propio Ayuntamiento— se maneja sin transparencia ni rendición de cuentas.
Durante 2023 y 2024, los montos reintegrados al sindicato ascendieron a más de 62 millones de pesos, sin que existan informes públicos de su destino final. La administración actual considera que este modelo “castiga el presupuesto municipal y compromete seriamente el desarrollo social de la capital hidalguense”.
Prestaciones desmedidas y gasto médico excesivo
Uno de los aspectos más alarmantes es la lista de beneficios establecidos en las Condiciones Generales de Trabajo, que otorgan días festivos adicionales y prestaciones específicas para diferentes oficios sindicales, como el “Día del Jardinero”, “Día del Alumbrado Público” o “Día del Control Canino”, además de sidras, canastas de recién nacidos, viáticos, llantas, y hasta festejos por la aparición de la Virgen de Guadalupe.
Adicionalmente, el gasto médico es otra fuente de presión presupuestaria. Según información oficial, la atención médica de Espinosa Bustamante y sus familiares —quienes también son agremiados con salarios elevados— representa una erogación mensual de 350 mil pesos en medicamentos, principalmente de patente, otorgados por convenios con la Cruz Roja. El gasto general en este rubro para todos los sindicalizados asciende a 3 millones de pesos mensuales, un daño severo al erario, según autoridades.
El actual modelo sindical, heredado de administraciones pasadas, prioriza el beneficio individual y colectivo de los agremiados por encima de la viabilidad financiera del municipio. La alcaldía actual ha señalado que esta red de beneficios fue construida a través de acuerdos opacos que no contemplan el impacto económico a futuro, pero siguen vigentes y legalmente vinculantes, lo que dificulta su modificación inmediata.
¿Y la rendición de cuentas?
En medio de este contexto, diversas organizaciones civiles y observatorios locales han solicitado que se inicie una auditoría integral al sindicato y al sistema de jubilaciones municipales, especialmente a figuras como Espinosa Bustamante, cuya permanencia en el sistema sigue generando inquietud sobre la equidad en el acceso a los recursos públicos.
Por ahora, ni el exlíder sindical ni el actual comité del Sindicato Único de Trabajadores al Servicio del Municipio han emitido postura pública sobre las denuncias.
El caso Percy Espinosa pone sobre la mesa un debate urgente: ¿hasta qué punto los beneficios sindicales deben coexistir con la sostenibilidad de las finanzas públicas? El reto para las autoridades será reconstruir un equilibrio entre los derechos laborales y el buen uso del dinero del contribuyente.
