Durante una reunión llevada a cabo en San Felipe Orizatlán con autoridades de 10 municipios, el secretario de Gobierno del estado de Hidalgo, Guillermo Olivares Reyna, hizo hincapié en la necesidad imperante de que los elementos policiales cuenten con el Certificado Único Policial y aprueben los exámenes de control y confianza. Advertencias contundentes fueron emitidas por el funcionario estatal, quien alertó sobre las graves consecuencias que podrían derivarse de la carencia de esta certificación.
Olivares Reyna subrayó que la ausencia del Certificado Único Policial y el fracaso en los exámenes de control y confianza podrían desencadenar en que los agentes se vean tentados a unirse a grupos delictivos o, peor aún, no sepan cómo responder adecuadamente ante la comisión de un acto ilícito, lo que representaría un riesgo directo para la población.
“Si tenemos una policía municipal en donde los elementos no cuentan con el certificado único policial, es tanto como deducir que esos elementos no saben cómo actuar como primeros respondientes”, enfatizó el secretario de Gobierno. “Si tienen conocimiento de un hecho delictivo, no están capacitados para intervenir, pues no sabrán qué hacer”.
Asimismo, Olivares Reyna destacó que la incapacidad para rendir el informe policial homologado ante el Ministerio Público, ente encargado de perseguir el delito, también sería un escenario problemático. La falta de preparación adecuada para actuar como primeros respondientes y la ineptitud para completar los informes pertinentes podrían generar frustración y enojo en las víctimas, llevándolas incluso a buscar justicia por su propia mano.
El secretario de Gobierno resaltó la importancia de abordar las deficiencias detectadas en los cuerpos policiales municipales, especialmente aquellas relacionadas con la falta de capacitación, equipamiento y condiciones laborales dignas. Olivares Reyna advirtió que estas carencias pueden generar un círculo vicioso que no solo perjudica a los propios agentes, sino que también tiene un impacto negativo directo en la seguridad y bienestar de la población.
Olivares Reyna hizo hincapié en que ya no es aceptable justificar la comisión de delitos bajo el argumento de necesidad, dado que existen programas sociales que brindan apoyo a diversos sectores de la población. Enfatizó que actualmente todos los sectores de la sociedad tienen acceso a oportunidades y recursos para salir adelante, por lo que no hay excusas válidas para recurrir a la delincuencia.