La historia de\xa0;Raúl Batres Campos\xa0;es un viaje de\xa0;8,974 km: desde su nacimiento en\xa0;Pachuca, Hidalgo, hasta su arresto en\xa0;Nuevo León, pasando por una\xa0;estafa millonaria\xa0;en\xa0;Barcelona. Este abril de 2025, el\xa0;“broker mexicano”\xa0;—acusado de defraudar\xa0;2.15 millones de euros— fue capturado, cerrando un ciclo que involucró a tres países y dejó lecciones sobre el\xa0;crimen financiero globalizado.
España: El teatro del fraude
En\xa0;2020,\xa0;Raúl Batres Campos\xa0;operaba en Barcelona con su empresa\xa0;BCN Training Academy. Usando anuncios en internet y\xa0;lujos visibles\xa0;(como un\xa0;Maserati\xa0;estacionado en su oficina), convenció a 59 personas de invertir. El esquema duró hasta que, abruptamente, dejó de pagar. Para entonces, ya había comprado boletos a\xa0;Frankfurt.
México: Refugio y caída
San Pedro Garza García, el\xa0;municipio más rico de México, fue su escondite final. Allí,\xa0;Raúl Batres Campos\xa0;siguió registrando empresas de\xa0;trading\xa0;bajo su nombre real, ignorando que la\xa0;Interpol\xa0;y la\xa0;Policía de Nuevo León\xa0;lo rastreaban. Su arresto —en un restaurante— confirma que ni la distancia ni los contactos protegen a los estafadores internacionales.
