En Hidalgo, las\n malformaciones congénitas del corazón se han convertido en la principal causa\n de mortalidad en menores de 1 año. Ante esta realidad, la Secretaría de Salud\n estatal (SSH) ha desplegado medidas cruciales para garantizar diagnósticos\n oportunos y atención adecuada a estas afecciones, con el objetivo de brindar a\n los infantes afectados la oportunidad de una vida saludable.
Rocío Téllez\n Girón Santos, subdirectora de Epidemiología de la SSH, destacó la importancia\n de reconocer los signos tempranos que podrían indicar problemas cardiacos en\n recién nacidos y lactantes menores de 1 año. Entre estos signos se encuentran\n la fatiga durante la alimentación, coloración morada en labios y uñas, retraso\n en el crecimiento y una oxigenación inadecuada.
La especialista\n señaló que las cardiopatías congénitas pueden ser detectadas incluso durante el\n embarazo, mediante ecografías que permiten identificar alteraciones en el\n tamaño y la forma de las cavidades cardíacas. Asimismo, durante las consultas\n médicas regulares, es importante que los profesionales de la salud estén\n atentos a la presencia de soplos cardiacos o cualquier anomalía en la\n oxigenación.
En México, entre\n 12 mil y 16 mil bebés nacen cada año con alguna malformación cardiaca, lo que\n convierte a esta condición en el principal padecimiento congénito registrado en\n el país. A nivel mundial, aproximadamente uno de cada 33 lactantes presenta\n alguna forma de cardiopatía congénita.
En respuesta a\n esta problemática, la SSH se unió a la jornada global de sensibilización sobre\n la prevención, diagnóstico y tratamiento oportunos de estas enfermedades\n cardiacas, en el marco del Día Mundial de las Cardiopatías Congénitas,\n celebrado el 14 de febrero.
Entre las\n medidas recomendadas para reducir el riesgo de cardiopatías congénitas durante\n el embarazo, Téllez Girón mencionó la importancia de llevar una alimentación\n saludable, evitar el consumo de sustancias nocivas como el tabaco y el alcohol,\n realizar controles prenatales desde las primeras etapas del embarazo, asegurar\n la ingesta de ácido fólico por parte de las madres y mantener la cobertura de\n vacunación contra enfermedades como la rubéola.