En una mañana marcada por el caos y la preocupación, un voraz incendio arrasó con el corralón “Grúas Gómez”, ubicado en la colonia Las Lajas, a lo largo de la carretera México-Tuxpan. El siniestro, de proporciones alarmantes, devoró rápidamente el combustible almacenado en el lugar, desencadenando una respuesta de emergencia sin precedentes por parte de las autoridades.
El corralón, utilizado para resguardar vehículos incautados por la Fiscalía General de la República (FGR), se había convertido en un almacén de hidrocarburos robados, un peligro latente que finalmente se materializó en esta mañana fatídica. Aunque las causas exactas del incendio aún no se han determinado, su rápida propagación se atribuye al combustible almacenado en el lugar.
La cercanía del corralón a zonas habitadas y a una carretera transitada había sido motivo de preocupación para los residentes de Las Lajas, quienes describieron el lugar como una “bomba de tiempo”. La falta de medidas de seguridad adecuadas exacerbaba aún más los temores de la comunidad, que veían con aprensión el riesgo constante que representaba este depósito de combustible ilegal.
La respuesta de emergencia fue rápida y coordinada. Bomberos de Tulancingo y Protección Civil de Santiago Tulantepec se movilizaron rápidamente hacia la escena, mientras que el Centro de Control, Comando, Comunicaciones, Cómputo, Calidad e Inteligencia (C5i) recibía reportes del incendio a las 05:00 horas. La magnitud del desastre requirió la intervención de un amplio abanico de entidades gubernamentales y organismos de emergencia, incluyendo la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), la Guardia Nacional, la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo (SSPH) y Protección Civil de varios municipios de la región.
El incendio, finalmente controlado alrededor de las 09:20 horas, consumió aproximadamente 200 vehículos y 100 motocicletas en el corralón. La presencia de una gran cantidad de combustible ilícito en contenedores y vehículos decomisados complicó aún más las labores de extinción y enfriamiento. A pesar de la magnitud del desastre, no se reportaron lesionados, una noticia que brinda un respiro de alivio en medio de la tragedia.
Las autoridades continúan trabajando en las tareas de remisión y enfriamiento, anticipando una afectación en una superficie de aproximadamente dos hectáreas. Mientras tanto, se espera que las investigaciones posteriores determinen las causas exactas del incendio y se tomen medidas para prevenir futuros desastres de esta naturaleza.\n