En un esfuerzo por garantizar la disponibilidad de agua en el presente y asegurar el recurso para las futuras generaciones, el Gobierno de Hidalgo elaboró un estudio y proyecto para la recarga artificial de acuíferos sobreexplotados en el Valle de Tulancingo, con una inversión estatal de 6.17 millones de pesos. Esta iniciativa se convierte en un paso estratégico para enfrentar el reto de la sobreexplotación hídrica en la región.
Proyecto estratégico para el futuro del agua
El estudio busca implementar soluciones técnicas que permitan recuperar los niveles de los mantos acuíferos y reducir la presión sobre fuentes de abasto que hoy se encuentran en riesgo. Con ello, se pretende construir un modelo hídrico sustentable que atienda las necesidades actuales de la población sin comprometer el acceso al agua en los próximos años.
Inversión en infraestructura hídrica complementaria
Paralelamente, la macrorregión Tulancingo ha recibido inversiones significativas en obras de infraestructura hídrica. Destacan los 25.8 millones de pesos destinados a la sustitución de líneas de conducción en Singuilucan y Palmilla, así como la perforación y rehabilitación de un pozo en Tepeapulco, acciones que mejoran el suministro y reducen pérdidas en la red.
Asimismo, se fortaleció el trabajo de los organismos operadores de agua con una inversión cercana al millón de pesos, considerada histórica en este ámbito, con el objetivo de mejorar la gestión técnica y operativa del servicio.
Agua segura y de calidad para la población
Además del abasto, la calidad del agua también ha sido prioridad. En este sentido, se destinaron más de 3 millones de pesos a la desinfección y control de calidad, garantizando que las familias cuenten con un recurso confiable y seguro para el consumo humano.
