En la tranquila avenida Carlos Lazo, a la altura de la colonia Palmillas y a un costado de la respetada escuela primaria “Josefa Ortiz de Domínguez”, se encuentra un bar que ha generado una preocupación creciente entre los vecinos: “La Bikina Terraza”. Vecinos alarmados han denunciado la venta indiscriminada de cerveza y bebidas embriagantes a menores de edad, un acto que no solo atenta contra la ley, sino que además ha generado situaciones peligrosas en las inmediaciones del establecimiento.
Los reportes de los residentes del área, han descrito como alumnos del plantel educativo Cebtis 59, el Centro de Bachillerato Tecnológico, Industrial y de Servicios, han sido vistos llegando al bar en horarios escolares, con consecuencias alarmantes. Según los testimonios, se han suscitado riñas y disturbios en el exterior del establecimiento, causados por el estado de ebriedad en el que los consumidores, muchos de ellos menores de edad, se encuentran.
Esta situación ha generado un malestar palpable entre los habitantes de la colonia Palmillas, quienes temen por la seguridad y el bienestar de los jóvenes de la comunidad. En respuesta a esta preocupación ciudadana, los vecinos han solicitado con urgencia la intervención de la dirección de reglamentos del municipio, instando a que se tomen medidas drásticas para poner fin a esta problemática.
Entre las peticiones de los vecinos se encuentra la clausura inmediata del bar “La Bikina Terraza” o, en su defecto, su reubicación a una zona alejada de la escuela primaria. Argumentan que la presencia de este establecimiento tan cerca de una institución educativa está induciendo de manera directa a los jóvenes a consumir bebidas alcohólicas, poniendo en riesgo su salud y su desarrollo académico.
Además, los residentes señalan que la ubicación del bar está en clara violación de las reglas y normativas municipales, que establecen claramente que los centros de venta de alcohol no deben estar cercanos a instituciones educativas, parques o lugares de esparcimiento familiar. Esta regla busca proteger el entorno escolar y garantizar un ambiente seguro y propicio para el aprendizaje de los niños y jóvenes de la comunidad.
